La piometra es una infección del útero que puede afectar a las perras. Se produce cuando las bacterias entran en el útero y se multiplican, lo que provoca una acumulación de pus en el interior del órgano. La piometra se produce normalmente en perras adultas y no esterilizadas y puede ser una enfermedad potencialmente mortal si no se trata.
Los síntomas de la piometra incluyen aumento de la sed y la micción, pérdida de apetito, letargo, fiebre, vómitos y diarrea. En algunos casos, la piometra puede incluso causar un aumento del tamaño del abdomen de la perra y una producción anormal de leche.
El tratamiento para la piometra en perras suele consistir en la esterilización quirúrgica, ya que la eliminación del útero es la única forma de curar la enfermedad y evitar su reaparición. En algunos casos, también puede ser necesario administrar antibióticos y terapia de fluidos para tratar la infección y mantener a la perra hidratada.
Es importante llevar a la perra al veterinario de inmediato si se detectan síntomas de piometra, ya que la enfermedad puede ser mortal si no se trata adecuadamente. La esterilización temprana puede ayudar a prevenir la aparición de la piometra y otros problemas de salud reproductiva en las perras.
